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La Virgen de Covadonga. La Santina burgalesa. Cillaperlata.

La Santina burgalesa (Cillaperlata).

 Hacía  muchos años que no venía a estos lares y me apetecía  recorrer de nuevo Cillaperlata y su entorno arqueológico para enseñárselos  a Pedro que quedó  encantado. Si encima añadimos nuevos medios digitales y el otoño encima, los motivos se incrementan.

   Agradecemos la atención y amabilidad al señor Claudio que, dejando sus quehaceres propios en su huerta, acudió raudo a enseñarnos el interior de la iglesia. 

La advocación a la Virgen de Covadonga es de tiempos antiguos.   Existieron dos imágenes gemelas de la Virgen de Covadonga que posiblemente se tallaron por el mismo autor (s.XII) en el Monasterio de San Juan de la Hoz (Cillaperlata).  Una fue destinada a Covadonga (Asturias) pero al quemarse ésta a causa de un incendio en el 1777, se hizo una versión que no se parecería  en nada a la original. Por lo tanto,  la imagen más antigua y auténtica que se conserva de esa Virgen es la de Cillaperlata.

    La otra Virgen que se venera en el pueblo es la de Encinillas y está ligada a una batalla denominada "de Cillaperlata o del Negro día". La leyenda consiste en un milagro protagonizado por la Virgen de Encinillas. Y es que los cristianos suplicaron a la Virgen que alargara el día unas horas más para poder finalizar el combate contra los musulmanes y, de este modo, derrotarlos completamente.  En la próxima entrada relativa al Monasterio de San Juan de la Hoz volveré a insistir sobre una probable y curiosa  teoría, que en más de una ocasión he hecho alusión, quizás en demasía.   

Cueva grande y covanuto,
posible origen de Cillaperlata.


Vistas al Ebro desde la cueva.

Río Ebro.




Casa del cura adosada a la torre de la iglesia.

Torre de la iglesia parroquial de Ntra. Sra. de Covadonga.

Calles típicas.

Escudo nobiliario.

Portada románica procedente
del monasterio de San Juan de la Hoz.

Pila bautismal del monasterio, que hace de jardinera.

Canecillos y escudo procedentes del mencionado monasterio.

Encima del escudo se observa un pequeño friso que representa dos pavos comiendo racimos de uvas que tienen características visigodas. 


Entrada a la iglesia.


Pila bautismal procedente de la iglesia desaparecida
de San Pedro
, de Frías,  posiblemente románica. 

Altar mayor.

Talla románica de la Virgen de Encinillas o "del Negro día".


Detalles.

Retablo del altar mayor donde se encuadra
la Virgen de Covadonga.

Talla románica de
la auténtica Virgen de Covadonga.

Detalles.

Clic.

Tallas en hornacinas laterales del altar.



Río Ebro con las aguas amansadas
por una presa hidroeléctrica.



VÍDEO ELABORADO POR KEPA B. RUANO:

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