Uno de los pueblos más bonitos y cuidados de la Bureba que merecen una visita obligada.
La villa de Cástil de Lences perteneció al antiguo Alfoz de Poza de la Sal, siendo ya citada en la colección diplomática oniense en el 1011. El paraje donde se ubica está abrigado de los fríos vientos del páramo de Masa.
A parte de su pintoresco caserío atravesado de canales y pequeñas cascadas, cabe destacar el monasterio de las clarisas, la ermita de Santa Ana y la iglesia de Santa María, que ha llegado hasta nosotros en buen estado, conservándose la mayoría de elementos básicos en una iglesia románica.
A pesar de los calores del fin de semana pasado, aprovechamos la tarde del sábado para visitar esta bonita localidad burebana.
Plaza del Olivo |
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Hexapétala |
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Monasterio de Las Clarisas |
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Iglesia de Santa María |
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Ermita de Santa Ana |
Vídeo elaborado por Kepa B. Ruano:
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